Pedes in terra ad sidera visus

Aquí, donde el vértigo de la vida, desafía a la naturaleza mas humana, en el borde del camino, sintiendo plácidamente la fuerza de la resurrección diaria, mezclo una timida sonrisa con el descarado y agitado viento de febrero que se permite mezclarse entre mis sueños desnudos de libertad. A lo lejos, en el sombrío horizonte, un sinfín de pájaros típicos de la comarca antequerana, se entrelazan en el vuelo, irrumpiendo solidariamente sus caminos, jugando a volar, como si de cualquier cosa se tratara, despliegan sus alas sobre mi cielo, y descaradamente siguen su sendero. Yo, atónito, sueño con volar entre la pineda que divisan mis ojos, volar con raíz en el suelo, para así poder recordar de donde venimos...y hacia donde vamos.

Pedes in terra ad sidera visus